Camboya con niños, una locura o una bonita experiencia?

Aunque pueda parecer todo un reto por el terrible pasado y presente que acompaña a este pequeño país del sudeste asiático, viajar hasta aquí en familia no lo es. En nuestro caso fue una lección de vida y con un Álvaro ya adolescente no os podéis imaginar lo que este muchacho aprendió. Cuando viajas a Camboya uno no puede mirar hacia otro lado, pero cuando uno viaja a Camboya con niños menos todavía. A cada paso que das, topas con la realidad del país, uno de los más pobres del sudeste asiático. Quien no ha oído hablar del exterminio que sufrió la población hasta hace unos años por parte de los Jemeres Rojos o de la explotación infantil, que por desgracia en muchos casos es la única fuente de ingresos para las familias, del analfabetismo, de las precarias condiciones de las casas o carreteras y por supuesto de la escasez de agua, luz y alimentos que sufre gran parte de la población.

Camboya con niños

 

Camboya con niños, una lección de humildad

A pesar de su extrema pobreza, los camboyanos nos abrieron las puertas de sus casas y de sus corazones durante nuestro largo viaje por Asia, el #Asiapara3 y nosotros lo disfrutamos en familia aprendiendo de sus gentes, de su gastronomía y por supuesto de todas las cosas bonitas que Camboya tiene para mostrar. Una vez más Asia nos hizo sentir como en casa, rectifico, mejor que en casa! así que este post va dedicado a todas las familias que todavía tienen cierto reparo en viajar a Camboya con niños.

Que ver y hacer en Camboya con niños

Los templos de Angkor Wat

Hablar de Angkor Wat, es hablar de Camboya. Muchos de los viajeros que arriban al país lo hacen con la única intención de visitar este hermoso recinto Patrimonio de la Humanidad y nosotros por supuesto no quisimos perdérnoslo.

Tres largas jornadas por los templos de Angkor, transcurrieron en un agotador ir y venir de aquí para allá, disfrutando a cada paso de sus bellezas naturales y arquitectónicas. La ciudad de Angkor Thom, el Templo de Ta Prohm, Baphuon, El Templo de Bayon y como no, el mayor Templo religioso del mundo y que lleva el nombre del recinto Angkor Wat.

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Si alguno se está preguntando si nuestro hijo Álvaro se aburrió, la respuesta es NO. El recinto está lleno de niños que casi viven en él, los mismos a los que sus padres explotan trabajando, pero como niños que son, también dedican momentos a los juegos que compartieron con Álvaro entre algunas risas.

Como llegar

Nosotros nos alojamos en Siem Reap, en el Happy Guesthouse, limpio, económico y con mucho ambiente. Alojarse en esta bulliciosa ciudad es sin duda la opción más cómoda pues esta situada a tan solo 6 kilómetros de los Templos de Angkor, además tiene un fantástico mercado nocturno, mucho comercio para pasear y muchos locales con ambiente. Hay varias maneras de llegar a Angkor desde Siem Reap, bus, taxi, bici y tuk tuk. Nosotros elegimos el tuk tuk a los niños les encanta, les parece una forma divertidísima de viajar y además es muy económico, contratamos un tuk tuk para los tres días y nos llevaba y nos traía cuando nosotros queríamos, cómodo, económico y muy divertido.

Camboya con niños

Delfines de Irawadi

Otra de las atracciones de un viaje a Camboya con niños, es sin duda el avistamiento de los delfines del Mekong y nosotros para verlos, viajamos hasta la ciudad de Kratie.
Se trata de una ciudad muy animada ya que se encuentra en el cruce de caminos para los viajeros que arriban a Camboya procedentes de Vietnam y Laos. La ciudad es muy animada sobre todo durante la jornada de mercado, que invade el centro y que se encuentra pegada al río Mekong y la estación de minivans. Repleta de comercios, restaurantes y hoteles es un lugar perfecto para disfrutar de unos bellos atardeceres sobre el Mekong.

Camboya con niños

Como llegar

Después de preguntar en la estación de buses de como llegar hasta el pueblo de Kampi que es donde se encuentra el embarcadero desde donde salen las barquitas y que está situado a unos 15 kilómetros de Kratie y para ello, decidimos que lo mejor sería alquilar un tuk tuk con chófer, una vez más Álvaro nos pidió hacerlo así y no en bus.

El chofer del tuk tuk, era un chico joven que vivía en las villas flotantes que salpican la carretera, al comprobar que éramos una familia, nos invitó a conocer a la suya y nos llevó hasta su casa, donde nos presentó a su madre, a su esposa y a sus pequeños, sin duda una experiencia que nunca olvidaremos.

Camboya con niños

Tuvimos suerte y montados en una precaria barquita, pudimos ver a los delfines nadar libremente por el Mekong, que se encuentran en peligro de extinción y disfrutar de otra jornada en familia al aire libre en uno de los pocos lugares del mundo donde se encuentra esta especie de delfines de agua dulce.

La jornada la completamos yendo a visitar el Templo Budista de Phnom Sombok aconsejados por nuestro amigo el chófer del tuk tuk y que se encuentra a medio camino entre Kratie y Kampi en el que está ubicado un monasterio de monjas budistas con las que compartimos un buen rato de charlas y risas, les encantó la visita de esta familia de occidentales que parecía que se habían perdido.

Camboya con niños

Visitamos Phnom Penh

Siempre nos gusta visitar las ciudades más importantes de los países que visitamos y en esta ocasión no iba a ser distinto, así que nos acercamos a la capital de Camboya para echarle un vistazo. La ciudad descansa a orillas del río y es precisamente a lo lago del interminable paseo donde se encuentran las atracciones turísticas más importantes de la ciudad. El Museo Nacional de Camboya, el teatro de marionetas, el Templo Wat Phnom, el Palacio Real, el mercado central y la pagoda de plata.
Una vez más nuestro hijo pudo disfrutar de la compañía y los juegos en las calles y plazas con los simpáticos niños camboyanos, con los que compartió algunas de sus golosinas. Largos paseos y ricas viandas completaron nuestro paso por Phnom Penh.

Camboya con niños

Viajar a Camboya con niños se puede y se debe, porque como habréis comprobado, es un país cargado de historia y de lugares maravillosos que seguro que a vuestros hijos les vea encantar conocer. Un país donde la amabilidad de sus gentes, a pesar de sus precarias condiciones de vida, es insuperable, un país donde cada día te regalan la mejor de sus sonrisas.