Si hay un recuerdo que nunca se borrará de mi mente, ese será el día que pasé navegando por los Backwaters de Kerala a bordo de un barco llamado Cinnamon (Canela) de la empresa Spice Routes. Fueron 24 horas llenas de buenas sensaciones.
El barco disponía de tres amplias y bonitas habitaciones con un moderno baño privado, una gran ventana que desde la cama te invitaba a disfrutar del paisaje durante la travesía, aire acondicionado y ventilador completaban la decoración. Una cocina y un salón decorado con buen gusto compuesto por un área salón con sofás y mesita de centro y una gran mesa donde comer. Unas grandes cristaleras lo rodeaban para poder disfrutar de los Backwaters de día y de noche. Cinnamon además contaba con una tripulación integrada por tres chicos de lo más amables y que en todo momento estaban pendientes de que no te faltara de nada. Uno de ellos era el que capitaneaba el barco, el otro era el Chef y el tercero, hacía las veces de camarero y de capitán.
Desayuno, almuerzo o la cena, fueron el claro ejemplo de una abundante y variada gastronomía hindú compuestos de frutas, pescados, verduras y carnes.
Mi habitación en el barco
Junto a la tripulación del barco
A bordo del barco el tiempo parecía detenerse, solo el piar de los pájaros se atrevía a romper la magia del momento, el leve susurro del aire o el suave deslizar del barco en el agua, era lo único que te hacía volver a la realidad.
Se respiraba una paz infinita, sentada al lado del «capitán» que suavemente deslizaba sus callosas manos por el bien barnizado timón, mientras navegábamos por las tranquilas aguas, esperaba ansiosa la llegada del atardecer. Poco a poco el ardiente sol que me había estado acompañando durante todo el día, parecía cansado y con ganas de decirme adiós, un adiós lleno de color, como todo en la India.
Relajada observo el maravilloso paisaje
Los atardeceres son algo increíble
A la mañana siguiente ahí estaba yo de nuevo, a las seis de la mañana espectante para ver salir al astro rey iluminando nuevamente los Backwater. Sin duda alguna espectáculos que nos brinda la madre naturaleza y que en este lugar adquieren aún más una belleza infinita.
Sin duda alguna navegar por los Backwaters, era una de las experiencias que con más ganas esperaba de este viaje. Muchas fueron las imágenes que sacadas de revistas de viajes o documentales mi retina retenía y que sin casi creérmelo por fin, había llegado el ansiado momento de vivirlo en persona. Un sueño que gracias a este #KeralaBlogExpress he podido hacer realidad por lo que les estaré eternamente agradecida al haberme dado esta magnifica oportunidad.
El paisaje es impresionante
Una experiencia 100% recomendable para disfrutarla en familia, ya que además de sentirte como en un hotel, puedes pedirle al capitán poder bajar del barco y pasear tranquilamente por los numerosos poblados que salpican las orillas de los Backwaters. Gentes amigables y tremendamente simpáticas querrán fotografiarse contigo y sin olvidar de preguntarte ¿Where are you from?, ¿De donde vienes?.